En la 78 Asamblea General de la ONU varios líderes mundiales se refirieron al conflicto en Ucrania. El presidente estadounidense Joe Biden dijo que si se permite la agresión a Ucrania, ninguna nación tendrá su independencia asegurada, mientras el líder ucraniano Volodímir Zelenski acusó a Rusia de usar los alimentos y la energía como «arma de guerra» y varios mandatarios llamaron a privilegiar el diálogo frente al derramamiento de sangre. Entretanto, un llamado a actuar y recaudar fondos contra la crisis climática también estuvo presente en múltiples discursos.
En el primer día del debate general de la 78 Asamblea General de la ONU, múltiples líderes mundiales se refirieron a la guerra en Ucrania como uno de los puntos urgentes a tratar, cuando el conflicto cumple 18 meses y no muestra signos de apaciguamiento.
Desde diferentes perspectivas, Joe Biden, Luiz Inácio Lula da Silva, Gustavo Petro, Miguel Díaz-Canel y otros mandatarios compartieron su visión sobre el conflicto ruso-ucraniano, expresaron sus preocupaciones y lanzaron propuestas para acabar con la guerra.
El pleno tuvo también la mirada puesta en la crisis climática, respecto a la que varios mandatarios del «sur global» pidieron a los países ricos pagar su «deuda climática» por haber hecho históricamente mayores contribuciones de gases de efecto invernadero a la atmósfera, causa principal del calentamiento global.
Otros temas expuestos fueron los recientes golpes democráticos en África, la crisis humanitaria en Haití y el renovado conflicto en Nagorno Karabaj.
El mundo tiene que apoyar a Ucrania. Ese fue el mensaje central del presidente Joe Biden en su discurso del martes 19 de septiembre en el marco de la Asamblea General de las Naciones Unidas.
El presidente estadounidense hizo un enérgico llamado para que el respaldo a Kiev frente a la invasión rusa no rebaje. “Estados Unidos, junto con nuestros aliados y socios de todo el mundo, seguirá apoyando al valiente pueblo de Ucrania en la defensa de su soberanía, su integridad territorial y su libertad”, dijo Biden.
El mandatario demócrata enfatizó en que el presidente ruso Vladimir Putin apuesta a que el mundo se cansará de apoyar a Ucrania, pero que recae en los países de las Naciones Unidas mantenerse firmes contra la agresión, bautizada por el Kremlin como una «operación militar especial» desde marzo de 2022.
«Por segundo año consecutivo, esta reunión –dedicada a la resolución pacífica de conflictos– se ve oscurecida por la sombra de la guerra”, lamentó el presidente Biden, que calificó el conflicto de “guerra ilegal de conquista emprendida sin provocación alguna contra su vecina Ucrania».
El mandatario estadounidense añadió que “Rusia es la única responsable de esta guerra» y que es «la única que se interpone en el camino de la paz”.
Por otro lado, Biden defendió una mejor inclusión de los países del sur en la gobernanza mundial, afirmando que Estados Unidos lleva a cabo «serias consultas» con varios Estados miembro sobre la ampliación del Consejo de Seguridad de la ONU y añadió que «necesitamos más voces, más perspectivas en la mesa».
El líder demócrata también hizo varias referencias a China, el gran rival de Estados Unidos, pero con un tono más diplomático. El mandatario indicó no querer un conflicto con China, sino competir: «Quiero ser claro y coherente: queremos gestionar de forma responsable la competencia entre nuestros países para que no se convierta en conflicto”.
Biden también abordó temas más específicos como la lucha contra la crisis climática e insistió en la inversión en energías limpias y la financiación para hacerla efectiva en los países en desarrollo.
Sobre la situación de seguridad en Haití, el mandatario pidió a las Naciones Unidas que aprobaran una «misión de apoyo» en el país caribeño, que sufre la violencia de las pandillas, porque «el pueblo haitiano no puede esperar mucho más».
Sobre la crisis del fentanilo, el opioide que mató a unos 76.000 ciudadanos estadounidenses en 2022, Biden destacó la necesidad de formar “una coalición mundial contra el fentanilo y las drogas sintéticas”.
En su intervención, el presidente de Ucrania Volodímir Zelenski resaltó los retos que enfrenta no solo su país, sino el mundo por las consecuencias de la guerra rusa en su nación.
“La comida y los puertos ucranianos han sido bloqueados por Rusia que apunta con misiles y drones, un claro intento de Rusia de usar como arma los alimentos a cambio del reconocimiento de parte, si no de todo, el territorio ucraniano que ha capturado”, declaró Zelenski.
El líder del país invadido desde hace más de 18 meses también acusó al Kremlin de utilizar el alza de precios de alimentos, del gas y la energía eléctrica como parte de su estrategia de guerra.
Asimismo, Zelenski pidió frenar las capacidades nucleares del territorio ruso, que “cada década crea una nueva guerra”, dijo al referirse a la guerra frente a Georgia y remarcar que las armas nucleares no habrían sido utilizadas en Siria sin la ayuda de Rusia.
“El terrorismo no tiene derecho a sostener armas nucleares (…) La destrucción está ganando su momento, el agresor está usando muchas armas no solo contra nuestro país, sino contra todos ustedes”, remarcó Zelenski.
Ante este panorama, el líder ucraniano destacó que Kiev combate y lucha para asegurarse de que después de la agresión rusa, “ningún país se atreva a atacar a otro”.
Zelenski insistió ante la ONU que Rusia tiene que devolver los territorios ocupados y pidió a la comunidad internacional mantenerse unida “para derrotar a Rusia y para que el mundo pueda enfocarse en los desafíos globales”.
Fuente: France24